jueves, 16 de abril de 2009

Soy el feliz dueño de... (I)

Aquí empieza una serie de posts, todos hechos para dar a conocer mi modesta colección de consolas, empezando por la que acaba de caer en mis manos: la Game Gear.

He aquí mi Game Gear ^^

El anterior dueño, que me la ha cambiado por un par de servicios (véase, configurar su portátil con Windows XP y Ubuntu, drivers incluídos -en el trato incluye su colección de cartuchos de GG-), me comentó que ya no le funcionaba, de repente y sin motivo alguno.

Cuando me comentó que no la quería, aunque le tenía cariño, me dijo que me la podía quedar si coseguía que funcionara. Como yo no soy un gorrón y estaba viendo cuál era el fallo (un fallo típico en estas consolas, según parece), quise darle algo a cambio.

Ya la tengo en mis manos, y he de decir que funcionar, funciona. No funciona bien, pero cuando se calienta un poco se ve bastante mejor (Sonar, suena muy bajo y con los auriculares, se escucha en mono, cosa que no debería). Es causa de los dichosos condensadores (baratos) que la gran S usó para su diseño, que al paso del tiempo se sulfatan (como las pilas de los 20 duros que si las dejas puestas sueltan un líquido pegajoso y que rompe el mando de la tele), más aún si llevaba varios años sin usarse. La solución es simple: comprar en una tienda de electrónica otros condensadores tipo "lenteja" de las mismas valencias, que son más duraderos, y a la vez más compactos, ya que nos referimos a una consola portátil y quizás se puedan pasar del tamaño según qué valencias. Dicho esto, espero tener la destreza suficiente para cambiar todos y cada uno de los condensadores para así revivir mi nueva Game Gear. Ya pondré fotitos del proceso :P

La pobre Game Gear averiada, junto al juego Fatal Fury Special

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